>>s: el trato con la gente, la mezcla con tantas ideologías, pensares, costumbres de gente, no sólo de México, de Centroamérica, eh… personas nacidas aquí, ah… personas que vienen de Perú, de Guatemala, del Salvador. Eh… bueno, lo que una palabra para mí significaba algo, para alguien más era diferente. Llegué a decir alguna palabra que ofendió a alguien, pero para mí, quizás, era una comida y para ellos era una ofensa. Sí, así que fue difícil para mí eso tratar de, de adecuarme, tratar de entender, pero a la vez, a la vez es… era gratificante enriquecerme, enriquecerme de toda esa cultura. En cuanto a las costumbres, bueno ahora yo puedo llamar a mi hermana y decirle, ahora yo sé preparar, no sé, pupusas salvadoreñas, ahora no solamente preparo comida mexicana, ahora sé preparar algún platillo peruano. Ah… se va enriqueciendo uno. Es una mezcla que si tomas lo mejor de todo, tienes más enriquecimiento para ti misma, adquieres más cultura, puedes enseñarle a tus hijos a valorar más lo que tú has aprendido o lo que tú tienes, puedes transmitirles. Tu herencia de lo que tú llegaste a conocer de niña, de lo que tú eras y la herencia de lo que ahora tienes, de lo que puedes transmitirle a los demás.